Enfermedades autoinmunes en perros

Las enfermedades autoinmunes en perros abarcan una gran variedad de desórdenes que afectan el sistema inmunológico. El sistema inmunológico de un perro es una red de células del tejido, glóbulos blancos, anticuerpos y otras defensas que tiene el cuerpo para luchar contra las infecciones y las sustancias extrañas, incluyendo bacterias y virus.

Las enfermedades caninas autoinmunes hacen que el sistema inmunológico ataque las propias células y tejidos del cuerpo. Por lo general, el cuerpo puede diferenciar muy bien lo que le es propio y lo que no. Lo propio incluye cada tejido que hay en el cuerpo y que debe estar ahí (las glándulas que mantienen los ojos húmedos, la piel, el pelo, los pulmones, las uñas). Lo que no es propio puede ser una astilla en el dedo, un virus de un resfriado común que acaba de entrar o bacteria dañina en el estómago. Es fundamental poder reconocer las diferencias entre las dos; lo propio no debe atacarse porque los tejidos del cuerpo son vitales para la salud, para la vida. Lo ajeno sí es una potencial amenaza y debe ser neutralizado o destruido.

Cuando hay una enfermedad autoinmune, el cuerpo se confunde y comienza a atacar un tejido específico o un tipo de tejido. Un ejemplo de esto es la queratoconjuntivitis sicca (QCS o sequedad ocular). En este caso, el sistema inmunológico ataca específicamente las glándulas lacrimales que mantienen la córnea con una película lagrimal.

A continuación, describimos las Enfermedades Autoinmunes Sistémicas (EAS). Tal vez el ejemplo más claro de comprender es la poliartritis autoinmune, en la cual el sistema inmunológico, por error, ataca el cartílago en cualquier articulación y, a veces, en todas.

Causas de enfermedades autoinmunes en perros

• Genética
• Infecciones (bacterianas o virales)
• Vacunación (por ejemplo la anemia hemolítica inmunitaria)
• Cáncer
• Disfunción en el microbioma (microorganismos intestinales). La microbiota intestinal afecta el sistema inmunológico y el espectro entero de los procesos fisiológicos.
• Los contaminantes ambientales influyen, por ejemplo, las drogas para pulgas y garrapatas y las toxinas ambientales.
• La radiación ultravioleta (UV) puede generar propensión o desencadenar enfermedades autoinmunes de la piel en algunos perros.
• También se ha informado que ciertas drogas serían potenciales causantes de pénfigo foliáceo, una enfermedad autoinmune cutánea que comúnmente afecta a perros y gatos.
• Las toxinas suelen ser las culpables de la inflamación sistémica. Nuestros cuerpos deben liberarnos de estas toxinas para poder funcionar de manera sana. Sin embargo, una exposición constante o extrema puede causar que el cuerpo deba pelear por periodos prolongados para erradicar las toxinas. Esto puede desencadenar en una inflamación sistémica y ocasionar o exacerbar desórdenes autoinmunes. Algunos ejemplos de las toxinas que pueden aumentar la inflamación son el humo de cigarrillo, los pesticidas, el mercurio y la sobre exposición a químicos, como productos de limpieza.

• Infecciones subyacentes. Hay que identificarlas y tratarlas. Muchos perros con enfermedades autoinmunes tienen infecciones subyacentes que pueden haber causado una respuesta autoinmune. Por ejemplo, infección sinusal, infección fúngica, virus o infecciones bacterianas. Prestale atención a los alergenos o sensibilidades. En muchos casos, los perros o gatos que tienen enfermedades autoinmunes pueden tener sensibilidad o alergia a ciertas comidas o pueden estar comiendo una dieta que tenga mucho contenido de alimentos que son naturalmente inflamatorios.

• Síndrome del intestino permeable. El intestino permeable también contribuye al desarrollo de enfermedades autoinmunes. Podés poner en práctica un enfoque holístico para tratar un intestino permeable, que incluya identificar y eliminar alimentos que contribuyan al trastorno, reducir el estrés y el uso de drogas NSAID (antiinflamatorios no esteroideos), mejorar el sueño y la flora intestinal para ayudar a mejorar la inflamación y las enfermedades autoinmunes.

• Estrés. Hay que reducirlo, ya que es una causa común de inflamación sistémica. Un perro necesita una buena cantidad de ejercicio, evitar ruidos fuertes y continuos y tener bastante tiempo de descanso. Prestale atención a las cosas que puedan estresarlo.

• Drogas convencionales. También son supresores autoinmunes, por ejemplo, los esteroides, la azatioprina, la ciclofosfamida y la ciclosporina.

Enfermedades autoinmunes en perros - Tipos, síntomas y tratamientos

Un trastorno autoinmune puede ser fatal para un perro, dependiendo de qué órgano o tejido esté rechazando el sistema inmunológico. Hay muchos tipos de enfermedades autoinmunes en perros y tienen síntomas variados.

Estas son algunas de las enfermedades autoinmunes que afectan a los perros, los síntomas a los que hay que prestarle atención y los métodos de tratamiento que puede prescribir tu veterinario.

Lupus Eritematoso Sistémico (LES)  

El Lupus Eritematoso Sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune rara que puede ser hereditaria en perros. Ciertas razas son más propensas a desarrollar esta condición. Por ejemplo: Lebrel afgano, Beagle, Collie, Ovejero alemán, Setter irlandés, Antiguo pastor inglés, Caniche y Sheltie.

Por lo general, los síntomas empiezan a manifestarse a los seis años de edad aproximadamente, pero pueden surgir a cualquier edad, y suelen tener brotes o disminuir por periodos. El LES puede afectar la piel, el corazón, los pulmones, los riñones, las articulaciones, la sangre y el sistema nervioso, ya que los anticuerpos de la sangre atacan las células y los tejidos del propio cuerpo. Generalmente, más de un órgano se ve afectado.

Los síntomas van a depender de dónde está situada la enfermedad, pero puede incluir los siguientes:

• Cojera o dolor en una o más articulaciones y músculos
• Sed u orina excesiva
• Úlceras en la cara o las patas
• Lesiones, cicatrices, ulceración o costras en la piel
• Alopecia (pérdida de pelo)
• Pérdida de pigmento en la nariz
• Fiebre
• Anemia
• Problemas de tiroides
• Ganglios linfáticos hinchados
• Infecciones renales
• Expansión de bazo, hígado o riñones

Las causas de LES son desconocidas, pero en algunos perros hay un componente hereditario, y la exposición a la luz ultravioleta empeora la condición. En casos severos, puede ser necesaria la hospitalización hasta poder controlar la enfermedad.

En casa, se recomienda reposo para los perros con dolor en las articulaciones, y la exposición al sol debe ser reducida. También se puede cambiar la dieta del perro para que sea más amigable para los riñones. Incorporá Vitamina B, carnes más claras, carnes bajas en fosfatos, como pollo, pato, conejo y pavo, y mucho Omega 3.

Tu veterinario también te puede prescribir drogas inmunosupresoras o esteroides para reducir la inflamación, pero los perros y gatos con LES no deberían ser vacunados.

Anemia Hemolítica Inmunitaria

La Anemia Hemolítica Inmunitaria sucede cuando el sistema inmunológico de un perro ataca los glóbulos rojos del cuerpo. Los glóbulos rojos son los responsables de llevar oxígeno desde los pulmones a todo el tejido del cuerpo. Con esta enfermedad, los glóbulos rojos se destruyen o dañan más rápido de lo que pueden ser reemplazados.

Los síntomas incluyen:

• Debilidad o letargo
• Pérdida de peso o anorexia
• Frecuencia cardíaca y respiración aceleradas
• Mucosas claras en encías y ojos
• Fiebre
• Ictericia
• Pérdida de color en ojos, encías y piel
• Desmayos en casos severos

Las causas de esta enfermedad son desconocidas, pero sucede con más frecuencia en perras hembras de mediana edad, y ciertas razas tienen más tendencia, como los Cocker Spaniel y los Caniches, pero cualquier perro podría tenerla. En algunos casos, la vacunación podría desencadenarla.

Los drogas con corticosteroides e inmunosupresores se suelen prescribir para mantener la enfermedad bajo control. En los casos en que la medicación no es efectiva, se puede llegar a extraer el bazo. El bazo se encarga de destruir los glóbulos rojos que el cuerpo considera dañinos o que ya no son útiles. Los perros pueden tener una vida saludable sin el bazo y, en casos muy raros, se puede realizar una transfusión de sangre.

Púrpura Trombocitopénica Inmune (PTI)

La Púrpura Trombocitopénica Inmune (PTI) o TrombocitoPenia Inmune (TPI) sucede cuando el sistema inmune ataca los trombocitos o las plaquetas, las células que se encargan de formar la coagulación de la sangre.

Los perros con esta condición pueden no experimentar desmayos o los problemas que sí pueden ocurrir con la Anemia Hemolítica Inmunitaria. Pero, aún así, puede ser una enfermedad severa si hay sangrado.

Algunos de los síntomas que pueden ocurrir con PTI son:

• Moretones
• Sangrado excesivo por una herida o cirugía
• Sangrado excesivo durante la menstruación
• Sangre en la orina o las heces

El tratamiento para PTI en perros es similar a la terapia para la Anemia Hemolítica Inmunitaria. Un veterinario va a administrar drogas con corticosteroides e inmunosupresores. También se puede extraer el bazo. Y una transfusión de sangre o plasma puede ayudar.

En perras hembras, se puede llegar a realizar una ovariohisterectomía para reducir el riesgo de hemorragia uterina.

Enfermedades autoinmunes de la piel

Las enfermedades autoinmunes de piel en perros son raras y variadas. Pueden ser difíciles de diagnosticar, y cada una tiene sus propios síntomas.

Estas son varias de las enfermedades autoinmunes cutáneas y los síntomas a los que hay que prestarle atención:

• Pénfigo: tiene muchas formas, pero por lo general causa piel escamosa, costras o llagas con pus. También pueden parecer ampollas que se rompen rápidamente. En algunos tipos, estos síntomas pueden limitarse a la cabeza y las patas antes de extenderse a otras partes. El tipo más severo es el Pénfigo Vulgar, que puede causar úlceras en la boca, el ano, el prepucio, la nariz y la vagina.

• Lupus Eritematoso Discoide: tiene que ver con el LES, pero solo afecta la cara y la nariz. Puede haber pérdida de pigmento, piel escamada o llagas con costras alrededor de la nariz. La luz ultravioleta empeora la formación de cicatrices en la nariz. Se recomienda protección solar y evitar la exposición directa de sol.

• Enfermedad de Vogt-Koyanagi-Harada: es extremadamente rara y ocasiona una pérdida de pigmentación junto con enfermedad ocular. La nariz, los labios, los párpados, las almohadillas de las patas y el ano pasan de ser negros a ser rosas o blancos, y los ojos sufren una infección severa. Tratarla a tiempo puede prevenir la ceguera.

Con las enfermedades de piel autoinmunes, el tratamiento suele incluir el uso de corticosteroides tópicos o dosis bajas o medias de prednisona.

Los casos leves pueden requerir poco tratamiento, mientras que los más severos requieren visitas veterinarias frecuentes con estrictas instrucciones para la administración de la medicación.

Poliartritis Autoinmune  

La Poliartritis Autoinmune puede ocurrir junto con el LES o por su cuenta. Comprende muchas enfermedades específicas, pero los síntomas en perros son mayormente los mismos.

Los síntomas incluyen:

• Fiebre alta
• Dolor de articulaciones o hinchazón
• Cojera que cambia de una pierna a la otra
• Ganglios linfáticos hinchados

En prácticamente la mitad de los casos de Poliartritis Autoinmune, los perros logran la remisión luego del tratamiento con corticosteroides. El Cytoxan o el Imuran son drogas que se suelen dar en el resto de los casos, y luego le siguen los esteroides.

Por lo general, esta enfermedad es bastante manejable con tratamiento, y el pronóstico para los perros afectados es bueno.

Tratamientos holísticos para enfermedades autoinmunes

Otros tipos de tratamiento para las enfermedades autoinmunes en perros, además de la medicación, incluyen una orientación holística. Puede ser de mucha ayuda al tratar este tipo de trastornos en perros. Tenés que hablar sobre estos tratamientos adicionales con tu veterinario para asegurarte de que sea seguro para tu perro y que no va a interferir con otras medicaciones.

El tratamiento va a depender de qué enfermedad inmunológica tenga el perro, pero estos son algunos de los tratamientos holísticos básicos que podés implementar:

• Una buena dieta cruda de calidad. Cambiá la dieta de tu perro, dejá de darle comida procesada como el "alimento balanceado", que tiene químicos y conservantes, y elegí una dieta de comida cruda que ayuda a reducir la inflamación en el cuerpo, es más natural para el sistema digestivo de los perros y hace que se produzca y se mantenga la buena bacteria del estómago.
• Evitá darle a tu perro o gato proteínas o comidas que no estén en sintonía con su sistema digestivo.
• Incorporá una variedad de comida saludable en la dieta de tu mascota, como fruta y vegetales crudos.
• Armá la dieta de tu perro según la alimentación estacional, ya que esto ayuda a mantener su cuerpo en sintonía con las estaciones para que pueda luchar contra las bacterias y virus de manera natural.
• Incorporá hierbas que sean buenas para el sistema linfático y el sistema inmunológico de tu perro.
• Asegurate de que tenga una buena ingesta de minerales y vitaminas de calidad.
• Incorporá suplementos como la cúrcuma, un reconocido antiinflamatorio, o el Omega 3, la Vitamina E, el Selenio y la Vitamina C.
• Incluí un buen suplemento prebiótico y probiótico en la dieta. Esto se puede lograr con cosas como los alimentos fermentados y el kéfir, o también pueden ser útiles los probióticos como el Fidospore.
• Dale a tu mascota buenas fuentes de Omega 3, como pescado o aceite de lino.
• Asegurate de que tenga acceso a una buena Coenzima Q₁₀, ya que ayuda a producir energía en las células. Debería ser producida de manera natural en el cuerpo, pero se puede ver afectada por cosas como la dieta, sobre todo por deficiencias nutricionales, la edad, enfermedades y efectos secundarios de otros tratamientos. La CoQ₁₀ se encuentra en las mitocondrias, que se encargan directamente de producir energía en las células y protegerlas de daños, enfermedades y virus.
• Identificá y eliminá potenciales toxinas, como los químicos de limpieza, los tratamientos para el pasto, los juguetes para perros que tienen alto contenido de toxinas, los recipientes de metal para el agua por los que se pueden filtrar químicos, etc.
• Masajes con un profesional capacitado que esté al tanto de la condición de tu perro.
• Reducí el estrés en el entorno de tu perro, incluyendo todo lo que podría causarle ansiedad.
• La hidroterapia es muy beneficiosa, especialmente para los perros con síntomas de artritis.
• Acupuntura con un profesional capacitado y autorizado.

Las enfermedades autoinmunes no son comunes, pero pueden desencadenar enfermedades severas si no se tratan a tiempo. Hay muchas cosas que podés hacer por tu mascota desde un punto de vista holístico, pero a veces estas enfermedades requieren el uso de drogas potentes.

Las enfermedades autoinmunes son un llamado de atención para todos, para que mejoremos cada aspecto de nuestra salud porque prevenir es mejor que curar.

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— Authentica Pets (@authenticapets) May 18, 2020

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